EL MORFEMA -KU EN EL QUECHUA ANCASHINO
The –ku morpheme in the Ancash Quechua
Francisco Carranza Romero1
Francisco Carranza Romero1
RESUMEN: Describe y analiza las diferentes realizaciones morfosemánticas del sufijo –ku en el
quechua ancashino. La presencia del sufijo –ku en el quechua ancashino es abundante,
además cumple diferentes funciones gramaticales y, consecuentemente, adquiere
diferentes significados. La data analizada corresponde a los datos empíricos propios
acopiados en varios años de investigación en las diferentes áreas que comprende el
quechua ancashino. Se aborda el estudio desde la perspectiva de la lingüística descriptiva
andina y se concluye puntualizando que el variado uso del sufijo –ku enriquece
el discurso quechua; pero, al mismo tiempo, crea dificultades a los que aprenden el
quechua como segunda lengua.
Palabras clave: sufijo –ku, quechua ancashino; funciones gramaticales; morfosemnántica.
ABSTRACT
This article describes and analyzes the different morphosemantic realizations of the
suffix –ku in Ancash Quechua. The presence of the –ku suffix in Ancash Quechua is
abundant, besides fulfilling different grammatical functions and, consequently, acquires
different meanings. The data analyzed correspond to the empirical data collected in
several years of research in the different areas that comprise the Ancash Quechua. The
study is approached from the perspective of Andean descriptive linguistics and it is
concluded that the varied use of the –ku suffix enriches the Quechua discourse; but, at
the same time, it creates difficulties for those who learn Quechua as a second language.
Keywords: suffix –ku, ancash quechua; grammatical functions; morphosemantic.
1 Instituto de Estudios de Asia y América, «Universidad Dankook», Seúl, Corea.
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ICHIKLLACHAW
Kay musyapakuyqa imanaw Anqash qichwachaw sufihu –ku tukuy laaya kanqantam
willakamun. Kay sufihu –ku nishqan Anqash qichwachawqa atskam, hina tukuy laayamanmi
tikran, hinaman tukuy laayaman niqninkuna tikran. Kay musyapakuy rurayqa
kikin rimaqkunapitam atska watapiqnam ashir ashir ayllukashqa, Anqash suyuchawchaw
llapan qichwa rimaqkunapita. Kay musyapakuyqa rurakashqa linguistika discriptiba
antichaw kanqanpitam, ichik shimichaw kayta nishwan sufihu –ku, kayqa qichwa
shimintsiktam kallpayaatsin, hinaman hukpiqqa qichwa yachakuqkunatam yachakuyninkunachaw
sasayaatsin ishkay kaq shimina kanqanraykur.
Pushaq shimikuna: ushaq pakishimi –ku; anqash qichwa; gramatika ruraynin; morfosemantika.
INTRODUCCIÓN
La lengua quechua expresa las variaciones morfosemánticas agregando una o más partículas
a una raíz o base. «El Quechua es una lengua aglutinante de tipo sufijante, lo
cual quiere decir que las palabras se forman mediante la adición a la raíz de un conjunto
de pequeñas partículas llamadas sufijos» (Julca, 2009: 52).
La presencia del morfema –ku es abundante en los enunciados del quechua ancashino
(Quechua I); su uso, combinación y distribución hacen cambiar el contenido del mensaje.
Una advertencia: Transcribo conscientemente en todos mis trabajos la semiconsonante
w en posición silábica prenuclear de los diptongos wa, wi (waka = adoratorio;
wiyay = oír); pero, al margen de la norma ortográfica quechua, prefiero transcribir u a
la semivocal en el margen final de las sílabas en los diptongos au, yu (waychau = huaychao
(pájaro de la puna), yukris = zorzal; los sufijos –chau = en, –nau = como). Que me
disculpen los académicos quechuas. El aprendizaje del alfabeto latino por los quechuas
se complica cuando los alfabetos usados en el quechua y el castellano se distancian.
Ya es bastante el uso de la grafía h (hache) en el quechua en vez de la grafía j (jota) del
castellano.
Otras advertencias sobre este trabajo: 1) Para diferenciar el quechua y el castellano
recurrimos a las letras cursivas para el quechua; las normales para el castellano. 2) Las
siglas: P = Pregunta; R = Respuesta; morf. = morfema.
MATERIALES Y MÉTODOS
El universo de estudio comprendió la zona andina de Áncash. Para el acopio de datos
se ha utilizado varias técnicas e instrumentos como la entrevista aplicada a los lugareños de los pueblos visitados, así como la revisión de materiales grabados y escritos de
quechuahablantes. El trabajo de investigación se enmarcó en los casos de los estudios
lingüísticos descriptivos debido a que el propósito principal fue pesquisar y describir
de una manera pormenorizada las funciones gramaticales y semánticas del morfema
–ku en el quechua ancashino.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
1. –ku, interrogativo, disyuntivo, hipocorístico.
1.1 Morfema Interrogativo. Este morfema –ku (–chu en Quechua II) es ubicado en el núcleo de la interrogación.
Esta distribución ayuda a entender mejor el mensaje porque funciona también como
topicalizador. Por esta razón, en la respuesta también se usa el sufijo topicalizador en
donde fue el núcleo de la pregunta.
Núcleo nombre:
P. ¿Shantiku yanapamanqa?
R. Manam, Shantiqa yanapashunkitsu.
P. ¿Santiago me ayudará?
R. No, Santiago no te ayudará.
El nombre propio Shanti (hipocorístico de Santiago) tiene dos morfemas que también
funcionan
Ayaku qupikun?
R. Ari, ayam qupikun.
P. ¿El alma aplasta?
R. Sí, el alma aplasta.
El nombre común aya (alma) tiene dos morfemas: -ku interrogativo; -m afirmativo topicalizador
en la respuesta. El morfma –m (en distribución postvocálica simple) tiene
su alomorfo –mi (en distribución postvocálica larga y postconsonántica).
Aya qupikun (qupi-ku-n) = El alma aplasta.
Es la creencia de que el espíritu errante del
muerto se posesiona del cuerpo de un humano vivo para absorber su vitalidad física.
Los que no creen, relacionan este hecho con la pesadilla (opresión en el pecho del que
está durmiendo).
Núcleo adjetivo:
P. ¿Hatunku markayki?
R. Ari, hatunmi markaa.
P. ¿Es grande tu pueblo?
R. Sí, es grande mi pueblo.
El adjetivo hatun (grande) de la respuesta lleva el morfema –mi por terminar en consonante.
Núcleo adverbio:
P. ¿Qanyanku chaamurqayki?
R. Ari, qanyanmi chaamurqaa.
P. ¿Fue ayer que llegaste? (¿Llegaste ayer?)
R. Sí, ayer llegué. (Sí llegué ayer y no otro día).
Aquí también el adverbio qanyan (ayer) de la respuesta, lleva el morfema –mi por terminar
en consonante.
Núcleo verbo:
P. ¿Shantiqa yanapamanqaku?
R. Shantiqa yanapashunkitsu.
P. ¿Me ayudará Santiago? (Dudo que Santiago me ayude)
R. Santiago no te ayudará.
Como el castellano carece del morfema sufijal interrogativo, en la traducción se puede
solucionar cambiando el orden del sintagma oracional: el núcleo de la interrogación
precediendo a otros elementos).
Como observamos en el diálogo superior, aparecen dos sufijos en la interrogación:
Shanti-qa, topicalizador en el nombre; yanapamanqa –ku, interrogativo en el verbo conjugado.
En la respuesta también hay dos morfemas: –qa en el nombre; –tsu negativo en
el verbo. Sin embargo, el morfema interrogativo –ku (–chu en Quechua II) no aparece
cuando se usan las palabras interrogativas o exclamativas como los pronombres pi
(quién}, ima (qué); los adverbios may (dónde), imay (cuando), ayka (cuánto).
¿Pitan kanki? ¿Quién eres?
¿Imata ashillanki? ¿Qué busca usted?
¿Maypita kayanki? ¿De dónde son ustedes?
¿Imay yurirqayki? ¿Cuándo naciste?
¿Aykata munayan? ¿Cuánto quieren?
1.2 Morfema interrogativo-disyuntivo.
En este caso, los dos elementos de la disyunción llevan el morfema –ku. La interrogación
puede ser directa o indirecta.
¿Ishtiku, Kalluku rikchanan?
¿Esteban o Carlos debe despertarse?
Maa, pikunash shiqiyanqa: kurukunakush, nuqakunakush.
A ver, quiénes van a ganar: los gusanos o nosotros.
El morfema –sh (después de vocal simple; –shi después de vocal larga y consonante) da
el matiz semántico de que este discurso es dubitativo o no es tan propio del hablante
que está repitiendo una expresión de otro u otros.
Kananqa, ¿puñukunkiku, watqankiku?
Ahora, ¿te vas a dormir o vas a vigilar?
Como se ve, se trata de oraciones interrogativas disyuntivas.
1.3 Morfema hipocorístico.
El morfema, pospuesto al hipocorístico, sirve para expresar mayor trato afectivo.
Antuku (Antu-ku): Antonito
Mañuku (Mañu-ku): Manuelito
Shantaku (Shanta-ku): Santacrucito
Shatuku (Shatu-ku): Saturninito
Los hipocorísticos Antu, Mañu, Shanta, Shatu llevan el morfema –ku. Por la influencia
del castellano también aparecen los femeninos Antuka, Mañuka, Shantaka, Shatuka (la
apertura vocálica –ku > –ko trae su opuesto femenino terminado en –a), tal como hablan
los bilingües.
Este morfema afectivo –ku también se usa para los nombres comunes. Añaku es el trato
cariñoso para añas (zorrillo, mofeta). Muchos narradores del mito Achicay o Achcay
o Achquee (Callejón de Huaylas) dicen añaku (zorrillito, mofetita), al referirse al animal
que se compadeció y protegió a la desgraciada niña que, perseguida por la malvada
Achicay, huía llevando en su bolsa los huesos de su hermanito devorado por la malvada
vieja: Añaku, piñaskir, Achikaypa ñawinman ishpapuykun (El zorrillito, enojándose,
orinó hacia los ojos de Achicay).
2. –ku, morfema verbal simple
2.1 Enfático. Puede significar alegría, lamento y énfasis sensorial o factual según el momento
y la acción.
Qanyanpitana tamyakun.
Llueve ya desde ayer.
Fuera de una enunciación afirmativa, hay más significados según las circunstancias:
Es expresión de alegría si la lluvia es después de una sequía (la terrible usya que causa
el caos en el campo); pero es un lamento si es durante los días de mucha lluvia. Los
cambios de tono también sirven para diferenciar los mensajes.
Aswaykiqa ima alli mishkikun.
Tu chicha está muy deliciosa (Tu chicha está bien deliciosa).
Aquí se elogia la dulzura o la exquisitez de la bebida.
La expresión «bien deliciosa» (alli
mishkikun) es una forma de superlativo muy usada en Perú.
Hallqaqa alalaakunmi.
La jalca hace frío intenso.
Imanaachi, kananqa qilaakuumi.
No sé que me pasa, ocurre que hoy siento pereza.
Upa karchi, wañukuuman, ninki.
Seguramente por ser un tonto dices, ojalá me muera.
Como se ve en los ejemplos, las sensaciones pueden ser externas o internas.
2.2 Reflexivo. Hay verbos que aceptan la acción reflexiva.
Rirpuykichau rikaakurillaashaq.
Por favor, permítame verme en su espejo.
Lliqllipa rapranwan hampikullay.
Cúrese con la hoja de la hierbasanta.
Patsa waranqanyaq puñukushun.
Durmámonos hasta que amanezca.
El sustantivo patsa se refiere al mundo espacial y temporal.
2.3 Provisionativo. El sustantivo se verbaliza porque es el objeto de la búsqueda y del
hallazgo.
Aku yantakuq. (yanta-ku-q).
Vayamos a buscar leña.
Kachikuqmi shamuu. (kachi-ku-q-mi).
Vengo a proveerme de sal.
Posiblemente, las siguientes expresiones han tenido el siguiente proceso de cambios:
yantakuypaq (yanta –ku –y –paq) > yantakuq (sincopación de –y –pa…)
leña -prov –inf –prop
kachikuypaq (kachi –ku –y –paq) > kachikuq (sincopación de –y –pa…)
sal –prov –inf –prop
(prov: provisionativo; inf: infinitvo; prop: propósito).
2.4 Ponerse alguna prenda de vestir. El nombre de la indumentaria para vestirse o usar se
verbaliza con –ku, y significa el uso o la acción de ponerse.
Achay umata yanuptinmi tsukukuntsik. (tsuku-ku-ntsik).
Nos ponemos el sombrero porque el sol sancocha nuestra cabeza.
tsuku: sombrero
–ku: morf. verbalizador del nombre
–ntsik: morf. de primera persona plural que incluye al oyente.
Unkukuyta munaptiipis, unkuu kapamaantsu. (unku-ku-y-ta).
Aunque quiera ponerme la túnica, qué mala suerte, no tengo mi túnica.
unku: túnica
–ku: morf. verbalizador del nombre
–y: morf. de infinitivo
–ta: morf. de objeto directo.
Ullqum punchukun; warmim hakukun.
El varón usa el poncho; la mujer usa el manto.
(El varón se emponcha; la mujer se
enmanta)
punchu: poncho
–ku: morfema verbalizador del nombre
–n: morfema de tercera persona; haku: manto
–ku: morf. verbalizador del nombre
–n: morf. de tercera persona.
Los casos de 2.3, 2.4 son muestras y razones de por qué el bilingüe quechua-castellano
verbaliza con mucha facilidad el nombre.
3. –ku, con morfema verbal compuesto
La distribución sintagmática del morfema -ku con otros morfemas verbales no es arbitraria.
Esta combinación añade nuevos elementos al significado del tema verbal.
3.1 Después de otro morfema verbal. 1) –pa –ku: acción breve y no intencional. El morfema –ku está después del morfema
temporal –pa (indicador de que la acción es de duración breve). En esta estructura
sintagmática el hablante expresa que la intención está ausente, o se supone ausente.
Generalmente se refiere a hechos fortuitos.
Puyñuta shumaq katay, ishkipakunkim (ishki-pa-ku-nki-m).
Carga en tu espalda y con cuidado el cántaro, se te puede caer.
ishki: tema verbal de ishkiy = caer;
–pa: morf. de duración breve
–ku: morf. de ausencia de intención; –nki: morf. de segunda persona verbal; –m: morf. aseverativo en distribución postvocálica simple.
Taqay warmish shullupakushqa (shullu-pa-ku-shqa).
Dicen que aquella mujer ha abortado. (Se supone que este hecho es una desgracia).
shullu: tema verbal de shulluy = parir; –pa: morf. de duración breve; –ku: morf. de ausencia de intención; –shqa: morf. de participio pasado, acción concluida.
Wachapakuy (wacha-pa-ku-y). Parir accidentalmente. Parir sin estar conviviendo.
wacha: tema verbal de wachay = parir; –pa: morf. de duración breve; –ku: morf. de ausencia de intención
–y: morf. de infinitivo.
El siguiente ejemplo es otro:
Allawchi, pachak watayuq karshi taqay awkisqa ishpapakun, ismapakun.
Pobrecito, dicen que aquel viejo se orina y se caga por tener cien años.
El ejemplo anterior, indudablemente, es un caso fortuito o desgracia.
La estructura de los verbos del ejemplo:
ishpa: tema verbal de ishpay = orinar; –pa: morf. de duración breve
–ku: morf. de ausencia de intención
–n: morf. de tercera persona verbal
isma: tema verbal de ismay = cagar, defecar
–pa: morf. de duración breve
–ku: morf. de ausencia de intención
–n: morf. de tercera persona verbal. En el caso de que la vocal final del morfema -pa llevara el cronema (fonema suprasegmental
de duración) la nueva estructura es -paa-ku. Entonces, la acción es de más
duración y con la participación de la voluntad.
A continuación están los ejemplos con
las vocales breves y largas, característica peculiar del quechua ancashino:
Waqtachaw ishpapaakuy (ishpa-pa-a-ku-y).
Orina afuera sin preocuparte de nada.
(Es la exhortación que se hace al menor que quiere escuchar o participar en la conversación
de los mayores).
Aquí se da el par mínimo: ishpapakuy (orinarse) / ishpapaakuy
(orinar despreocupado sin importar el tiempo).
En los siguientes ejemplos se aprecian los significados diferentes por la ausencia o
presencia del cronema.
Nuqaqa musyapakuqmi chaamuu; manam musyapaakuqtsu.
Yo llego aquí para informarme; y no para criticar.
Otro par mínimo: musyapakuy (informarse) / muyapaakuy (criticar, hablar mal de otro).
2) –ra-ku: énfasis en la acción de duración indefinida. Este sintagma compuesto está
formado por –ra (morfema verbal de duración indefinida) y –ku (morfema enfático).
El morfema temporal –ra, como en los ejemplos siguientes, puede llevar el cronema en
la vocal a para enfatizar la acción duradera.
Rikaraakuyllatsu; alli yachakuy (rika-ra-a-ku-y-lla-tsu).
No te quedes solamente mirando; aprende bien.
Hitaraakuytsu; shaarir, imallatapis ruray (hita-ra-a-ku-y-tsu).
No permanezcas echado; levantándote, haz siquiera algo.
3) –ykacha-ku: énfasis en la acción repetida sin seriedad. Este sintagma está compuesto
por –ykacha (morfema verbal de acción repetitiva y sin ninguna seriedad) y –ku (morfema
enfático).
Takita, wiyaskir patsa, sikita milluykachakunki; tushu pacha kanki (millu-ykacha-ku-nki).
Apenas oyendo la música contorneas tu cadera; eres un vicioso del baile.
millu: tema verbal de milluy = contornear; –ykacha: morf. de acción repetida sin seriedad;
–ku: morf. enfático
–nki: morf. de segunda persona verbal.
Qipillaata yataykachakuytsu (yata-ykacha-ku-y-tsu).
Por favor, no manosee mi bulto.
yata: tema verbal de yatay = manosear, palpar, tocar; –ykacha: morf. de acción repetida sin seriedad; –ku: morf. enfático
–y: morf. de imperativo en segunda persona
–tsu: morfema negativo.
En el castellano el morfema –ear del infinitivo sirve, generalmente, para expresar la
acción repetitiva. «Este sufijo es uno de los más activos en la derivación verbal en todas
las variedades del español, particularmente en las americanas». «Expresan el ejercicio
reiterado de una actividad» (NGLE, 2010, 8.3.1; 8.3.1f).
4) –taq-ku: sorpresa negativa. Esta estructura del morfema aspectual –taq (ocurre que,
sorpresa) con –ku (enfático) expresa la idea negativa. Y puede estar después del nombre,
pronombre, adjetivo, adverbio y verbo.
Después del nombre: Qapaqtaqku kanki (qapaq-taq-ku). Date cuenta, no eres dios.
Después del pronombre: Nuqataqku (nuqa-taq-ku). Ocurre que yo no soy.
Después del adjetivo: Allitaqku (alli-taq-ku). Ocurre que no es bueno.
Después del adverbio: Qanyantaqku rikarqaq, qanyaatinmi (qanyan-taq-ku). Me consta que no fue ayer cuando te vi, fue anteayer.
Después del verbo: Wamraykiqa rikchantaqku (rikcha-n-taq-ku). Ocurre que tu criatura no se despierta.
rikcha: tema verbal de rikchay = despertar; –n: morf. de tercera persona verbal; –taq: morf. de sorpresa; –ku: morf. enfático. En este caso los morfemas –taq-ku van pospuestos al verbo ya conjugado por eso no
se puede decir que se trata, propiamente, de morfemas verbales.
5) –tsi-ku: acción en beneficio o perjuicio del sujeto. Este sintagma está compuesto
por el morfema causativo –tsi y el enfático –ku; ambos expresan que la acción es en
beneficio o daño del sujeto.
Taqay awkisqa, mana qillqata riqirmi, qillqatsikullan (qillqa-tsi-ku-lla-n). Aquel anciano pide que le hagan el favor de escribir porque no conoce el alfabeto.
qillqa: tema verbal de qillqay = escribir; –tsi: morf. verbal causativo; –ku: morf. enfático;
–lla: morf. de cortesía
–n: morf. de tercera persona verbal.
Qillayniki kanqanyaq alli hampitsikuy (hampi-tsi-ku-y).
Hazte curar bien mientras tengas dinero.
hampi: tema verbal de hampiy = curar, remediar.
–tsi: morf. verbal causativo
–ku: morf. enfático
–y: morf. de imperativo en segunda persona.
6) –tsa-ku: transformación enfática. Estructura formada por el morfema transformativo
–tsa y el morfema enfático –ku ; ambos expresan la transformación con énfasis.
Si la vocal a (margen final del morfema transformativo) es de duración larga y expresa
mayor énfasis.
Yaqashqa awatam allitsakuu. (alli-tsa-ku-u).
Arreglo con dedicación el tejido dañado.
Pukru rimaq pampata pampatsaakushun (pampa-tsa-a-ku-shun).
Aplanemos con esmero la plaza hundida.
3.2 Antes de otro morfema verbal. En esta estructura hay dos casos:
1) –ku-ri: Combinación de énfasis e incoacción. El morfema –ku precede al morfema
incoativo –ri. El tema verbal se enriquece con los semas enfático e incoativo.
Chukru tantallatapis mikukurishun. (miku-ku-ri-shun)
Comamos con gusto aunque sea el pan duro.
miku: tema verbal de mikuy = comer; –ku: morf. enfático; –ri: morf. incoativo; –shun: morf. de imperativo o exhortativo de primera persona del plural.
Pichi uraykaamun; maa, riqikurillay. (riqi-ku-ri-lla-y).
Alguien está bajando hacia aquí; a ver, reconózcalo, por favor.
riqi: tema verbal de riqiy = reconocer; –ku: morf. enfático; –ri: morf. incoativo; –lla: morf. de cortesía
–y: morf. de imperativo de segunda persona.
2) -ku-yka: Acción con énfasis y en proceso de realización. El morfema enfático –ku
precede al morfema progresivo –yka. El resultado es enfático y progresivo.
Qishyakuykaptii chaaramunki. (qishya-ku-yka-pti-i)
Llegas cuando estoy sufriendo por la enfermedad.
qishya: tema verbal de qishyay = enfermar, estar enfermo; –ku: morf. enfático
–yka: morf. verbal progresivo
–pti: morf. subordinador temporal
La vocal larga (ii) del margen final de la sílaba; –pti es la marca verbal de la primera
persona del singular.
Huchushqa rarqatam pirqakuykaa. (pirqa-ku-yka-a).
Estoy levantado el muro de la acequia derrumbada.
CONCLUSIONES
El variado uso del morfema –ku enriquece el discurso; pero, al mismo tiempo, crea
dificultades a los que aprenden el quechua como segunda lengua.
Los quechuahablantes para expresar los hipocorísticos, aunque los nombres sean ajenos
a su lengua, recurren a la palatalización: Shanti (Santiago), Ishti (Esteban), Kallu
(Carlos), Mañu (Manuel, Manuela).
La frecuente y fácil verbalización de los nombres es una característica del quechua. Y
los bilingües quechua-castellano siguen con esta tendencia.
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